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¿Agujetas? Qué dolor… Parte II

¡Buenas noches a todxs lxs lectorxs de Transforma-T!

Como bien habéis podido leer en el título, esta es la segunda parte o la continuación de la publicación del domingo pasado 2 de febrero. Si todavía no habéis leído la primera parte, os invito a que vayáis al post: “¿Agujetas? Qué dolor… Parte I” para que podáis seguir el hilo de este.

Para las personas que ya hayan leído la primera parte de este tema, vamos a empezar ya con el asunto. Os preguntaréis por qué hay una segunda parte de esta publicación, si en la primera quedó “claro” por qué se producían bioquímicamente las agujetas.

¿Y si yo ahora os digo que lo explicado en la primera parte no es del todo cierto?

En primer lugar, quiero decir que una de las labores de un/a científicx es estar al día sobre los avances en la ciencia, contrastar y analizar resultados y datos obtenidos… Esta es la esencia de esta segunda parte.

La primera idea plasmada en la publicación “¿Agujetas? Qué dolor… Parte I” es una de las primeras hipótesis que se tenían sobre la causa a nivel del metabolismo celular de las agujetas. Sin embargo, hay numerosas evidencias científicas que llevan a dejarla un poco de lado.

– En primer lugar, una de las evidencias demuestra que la eliminación del lactato celular es lo suficientemente eficaz como para que este no se acumule en grandísimas cantidades.

– En segundo lugar, no se han observado nunca al microscopio los cristales de lactato que producirían las microrroturas celulares.

– Por último, existen personas con una enfermedad denominada enfermedad de McArdle, patología que se caracteriza por la incapacidad de descomponer el glucógeno (fuente de energía) por una deficiencia enzimática. En este caso, estas personas no producirían ácido láctico durante un ejercicio físico intenso, pero aún así experimentarían dolor.

Estas tres evidencias proponen que la causa de las agujetas no es la acumulación de una gran cantidad de ácido láctico que cristaliza, dando lugar a roturas celulares. Entonces, ¿cuál es la causa de las agujetas?

Os explico, aunque todavía no se conoce la causa exacta, existe una teoría que es la más aceptada por la comunidad científica. Esta teoría postula que el dolor producido después de un ejercicio físico intenso se debe a roturas de las fibras musculares (células del músculo) causadas por el propio ejercicio físico en sí, es decir, causadas por el esfuerzo al que se someten las células del músculo durante este ejercicio. Este “exceso de trabajo” es el que causaría el dolor y la hinchazón que caracterizan a las agujetas.

Aún así, existen otras teorías más o menos aceptadas… ¿Qué os parece?

Ya para finalizar con esta publicación, lo que me gustaría resaltar es el hecho de que unx científicx siempre está en continuo proceso de aprendizaje, siempre hay algo nuevo sobre lo que investigar, siempre hay algo nuevo que descubrir. Además, la comunidad científica está compuesta por muchísimas personas, que al igual que nosotrxs, se dedican a trabajar e investigar para conocer una gran variedad de aspectos de la ciencia. Valorar y conocer el trabajo de los demás nunca sobra ¿verdad?

Manuela Giraldo Acosta.

Por transformat3

Somos tres estudiantes del Grado de Bioquímica de la Universidad de Murcia a las que nos apasiona la ciencia y la cosmética, así que nos preguntamos, ¿por qué no fusionarlas y aprender un poco más de ambas? Con esta pregunta surge Transforma-T, blog de divulgación de la parte científica que presenta la cosmética.

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